Viva y Eficaz

 Hola a todos! 

Tenía un Tiempecito que no escribía, pero estoy contentísima de volver a escribirles y en esta ocasión sobre la palabra de Dios.

¿Qué es la palabra de Dios?

Es un mensaje divinamente  inspirado, esto quiere decir que el autor es Dios mismo. Uno de los títulos que se le atribuye a la palabra de Dios es “La Biblia”, la cual es una colección de libros, cartas y escritos que tienen el propósito de revelar quién es Dios y su voluntad a la humanidad. En ella se encuentran historias, enseñanzas y profecías que como bien he dicho,  fueron inspiradas por Dios y trascienden a través de los tiempos.

Jesús dijo:

“El cielo y la tierra pasaran, pero mis palabras no pasaran”
Mateo 25:35

Esta palabra tiene un toque especial,  es “Viva” y “Eficaz”. Sé que más de uno tiene un testimonio que contar sobre algún texto de la Biblia que haya  marcado su vida, que le haya ayudado a tomar alguna decisión importante o aclarado alguna idea para resolver un problema. Cuando la palabra es capaz de producir un “cambio” entonces ejerce una acción y se hace “Viva”.

Pablo dijo a Timoteo que toda la escritura es inspirada por Dios y que es útil, pero… ¿útil para qué?  Esta es útil para enseñar, para redargüir, para corregir y para instruir, es decir, toda la palabra ejerce una acción útil en quien la lee.

Al mismo tiempo es eficaz. Dios dijo a través de Isaías: 

“Porque como desciende de los cielos la lluvia y la nieve, y no vuelve allá, sino que riega la tierra, y la hace germinar y producir, y da semilla al que siembra, y pan al que come, así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié.”
Isaías 55:10-11

La palabra de Dios produce el efecto que él espera, hace lo que él quiere  y no vuelve a él vacía. 

La lectura y estudio de la palabra de Dios es de suma importancia para la vida del creyente. Siempre escuché en la congregación como se instaba a leer las escrituras. Recuerdo un tiempo de mi vida en el que me aburría leer la Biblia, era tan tedioso para mí, no sentía ninguna motivación personal  para hacerlo, creo que esto se debía a que veía la Biblia como un libro mas (uno muy largo y complejo por cierto). Pero un día la palabra cobró vida en mí, su contenido se volvió interesante y ya no solo quería leerla sino también estudiarla, escudriñarla y comprenderla.

¡Su palabra ha sido de tanta ayudada en mi vida cristiana y ha sido eficaz para mí!

Dios está dispuesto a que su palabra tome acción en tu vida y sea eficaz, solo dedícale la atención y el tiempo necesario y verás como su palabra se encargara de cumplir el propósito para lo cual es enviada a tu vida.  

¡Bendiciones!